martes, 20 de julio de 2010

Recuento















Un día martes en la noche. Hace calor. Los autos pasan por la Pragerstraße, y el ruido de los motores, las ruedas arrasando con el asfalto me quitan las ganas de abrir las ventanas de mi habitación.
Ha pasado mucho tiempo desde la ultima vez que escribi en este Blog, e incluso pensé que la cuenta había expirado. No fue así, y eso me alegra mucho.
Resulta que no he escrito porque no lo haya necesitado, sino porque el volver a organizar mi vida me ha tomado mucho. Han pasado muchas cosas que no se asemejan ni un poco a lo que fue un par de anos atras.
Podría decir que ahora estoy preparada, para seguir lo que empecé y no terminé.
Ahora iré a dormir, y como casi todos los días me levantaré a eso de las 7 para salir a correr a la orilla del Danubio. Volver a casa, empacar mis cosas e irme a Gresten, a celebrar el cumpleanos de la abuela.
Seré por dos días normal, después seré la mesera de la cafetería, luego terminaré las condenadas pinturas, y al final de todo, mientras se derrite el arcoiris, cantaré una canción limpiando la casa.
Lo mejor de todo, es que sé que nunca te interesarás por ver esto.